Aquí es donde entramos en modo pánico. No es para menos.
Si hemos sido precavidos y tenemos copia de seguridad de nuestros datos, el “modo pánico” puede bajar varios grados.
Si el fallo del disco duro no es mecánico, podemos dejar el “modo pánico” otros tantos grados abajo; dejándolo ya casi en “modo semi-sonrisa”.
¿Qué puede suceder para que nuestro ordenador no reconozca el disco duro de arranque? Pues hay varias posibilidades, entre otras muchas; al crear una partición ésta no se crea correctamente, un corte eléctrico, una subida de tensión, al intentar crear una partición tu Mac da error y se apaga, se corrompe la tabla de particiones del disco duro, borrar una partición creada con Boot Camp, o haber instalado una SSD en nuestro antiguo Mac para usarla junto con un HDD, etc., etc.
La “denominación” Fusion Drive lleva a desconcierto a muchas de las personas que, por primera vez, se hacen con un Mac equipado con esta característa. Les venden que en el interior del equipo van a encontrar dos disco duros; uno sólido (SSD) y otro óptido (HDD). Tampoco les mienten, si han escogido esa opción a la hora de configurar su Mac, será así. Pero realmente, ¿saben qué és y cómo funcionará Fusion Drive en su ordenador?