Los anisópteros (Anisoptera, del griego ανισος anisos, “desigual” y πτερος pteros, “alas”) son uno de los dos infraórdenes clásicos del suborden Epiprocta.
Se conocen comúnmente como libélulas, aunque este término, suele usarse también en un sentido más amplio para designar a todos los odonatos.
Son paleópteros, es decir, insectos que no pueden plegar las alas sobre el abdomen. Se caracterizan por sus grandes ojos multifacetados, sus dos pares de fuertes alas transparentes y por su abdomen alargado.
Pariente cercano de la Mantis Religiosa.
Vive en zonas áridas y secas de clima cálido, y en zonas de escasa vegetación con ramas secas para camuflajearse mejor. Es parecida a la Mantis religiosa, aunque de mayor tamaño (de 10 a 13 cm).
su diferencia más característica es que la hembra de Empusa pennata tiene una gran cresta en la cabeza y el abdomen es más ancho. Los ejemplares jóvenes no presentan el abdomen igual, sino que es como una protuberancia rugosa y empinada. Viven entre la vegetación seca, que utiliza para caminar agarrándose a las pequeñas ramas y tallos, aunque pueden encontrarse en zonas de media montaña y con ciertas dosis de humedad. Son muy voraces. La hembra no se come al macho tras aparearse.