Llegó el día.
Mañana nos vemos. A ver qué me cuentas. Espero sean buenas noticias. Aunque hasta dentro de unos días no lo sabré. Pero seguro que será así.
Hace tiempo que no sé nada de ti, eso es bueno.
Cuánto más lejos, mejor.
Y si no nos volvemos a ver, pues que te vaya bien. A mi me irá mejor todavía.
De todas formas nunca has sido bienvenido.